Pelotudis Argentum

Hoy esteramos hablando de esta particular raza que, lamentablemente, en lugar de extinguirse continúa su desarrollo y perfeccionamiento (que paradójicamente implica lo contrario de estos dos últimos conceptos)

Los antiguos ancestros de esta raza se remontan al año 1492. Por un poco más de 300 años, y con varios idas y vueltas en el medio, se fue gestando lentamente y perfeccionando su principal característica: La Pelotudez (Sí, con mayúscula).
Como es sabido, toda involución no se da en un punto exacto en el tiempo y es difícil determinar su fecha exacta de nacimiento u origen, sino que es mas bien un proceso en un margen de tiempo determinado y bastante largo.
El caso del Pelotudis Argentum, a pesar de ser una raza excepcional en el 99.9% de su composición, no se encuentra exenta de esta regla de la involución, pero con la siguiente particularidad: el margen de tiempo en el que se dio su consolidación (y podemos decir nacimiento) fue en un periodo bastante corto, y como es muy fácil identificar un pelotudo, podemos decir con exactitud las fechas de este proceso de consolidación y asentamiento: fue entre el 25 de mayo de 1810 y el 9 de julio de 1816.

Hay hipótesis acerca de que algunos de los personajes involucrados en este proceso no tenían la intención de crear al Pelotudis Argentum. Es más, posiblemente si sabían el desarrollo que tendría esta raza en el futuro, probablemente no hubiesen participado del proceso.
Igualmente, son solo hipótesis. Hubo muchos pelotudos en estos últimos 200 años escribiendo pelotudeces (valga la redundancia) que hacen dudar de la fidelidad de la información y datos.

Como ya mencionamos en "Voto calificado carajo!"; no es difícil encontrar un pelotudo ¿Te subiste a un taxi alguna vez? En cualquier viaje de 10 minutos o más seguro viste un pelotudo, ya sea porque el propio chofer lo era o porque hubo "un pelotudo que se cruzó", "un pelotudo parado en doble fila", "un pelotudo tocando bocina", "un pelotudo andando en bicicleta", "Mirá ese pelotudo de la moto como se mete", "Mirá ese pelotudo como cruza" y así puedo seguir in eternum.
Y eso que no voy a hablar de los pelotudos del bondi, del subte, del tren, los del trabajo, los de atención al cliente...
En fin, no mencionaremos aquí la cantidad de pelotudeces que fueron producidas por esta raza ya que al menos serían 73.316, una por cada día desde el 9 de julio de 1816 hasta la fecha de publicación de este artículo. Y multipliquen eso por cada integrante de esta raza. Y mejor no pasemos a la cantidad de pelotudeces por hora o minuto, es un número bastante desalentador.

Pasemos ahora a alguna preguntas que puede hacerse el pelotudo comúm:

- ¿Pero son todos pelotudos?
Si. Todos los pertenecientes al Pelotudis Argentun son, en mayor o menor grado, pelotudos. Somos tan pelotudos que no nos damos cuenta.

- ¿Es una raza en peligro de extinción?
No por el momento. La idoliatría de la pelotudez ha permitido que esta se multiplique de manera exponencial permitiendo alcanzar grados de pelotudez nunca antes vistos.

- ¿Cuáles son los exponentes más peligrosos del Pelotudis Argentun?
Los fanáticos, porque además de fanáticos son pelotudos.

- ¿Es contagiosa la pelotudez?
Si y mucho. Se han evidenciado casos de seres de otras razas que al convivir con el Pelotudis Argentun se han vuelto pelotudos.

- ¿Se puede hacer algo para modificar o cambiar la principal característica?
Este es un terreno aún inexplorado. Pareciera ser que al Pelotudis Argentun no le interesa hacer nada al respecto (no sabemos realmente si no le interesa o es que son tan pelotudos que no saben qué o cómo hacer). Individuos de otras razas que han trabajo sobre el Pelotudis Argentun no han logrado avances significativos, profundos ni permanentes.